Por Liliana Chávez |
Me encontré con los chavos de Bluish en su afanoso intento por convertir el Rivas en vino, repasando las rolas del toquín de más tarde, y pensando en mujeres:
-Ramos: ¿De cuántas mujeres estaría conformado su harén?
-Chema: No sé.
-Tavares: Sí de varias, muchas. Pero habría que pensarle…
-Pablo: Una.
-Liliana: Ni tú te la crees, Pablo.
Bluish está dentro del Indie Rock, pero, si pudiese decir que suenan a algo, diría que se oyen un tanto como Sparklehorse, Beach House, Smashing Pumpkins, Radiohead, Sigur Ròs… no sé exactamente, suenan como melancolía.
La banda comienza con Pablo (voz y guitarra), un año más tarde Ramos (guitarra) le hace segunda, luego se unió Tavares (bajo); después Chema (sintes, teclas), que llegó para hacer más chida a la banda.
-Ramos: Somos, gracias a Chema, “Bluish technology”.
-Tavares: Ya no sonamos tan fofos.
-Liliana: ¿Dónde suelen tocar?
-Pablo: Por lo general suelen invitarnos a tocar en Aguascalientes, en bares, toquines, festivales. Aunque claro, queremos salir de gira y contactar con una disquera, lo que nos ayudaría a ser más conocidos.
-Chema: Además, buscamos colgar nuestras canciones en redes. Pienso que la música de Bluish atraviesa la brecha generacional, puede gustar tanto a chavos como a mayores.
- Liliana: ¿Las canciones que han hecho tienen algún contexto en general?
-Pablo: Depende de la rola
-Tavares: Están hechas a lo pendejo
Risas
-Tavares: Hablando en serio, en mi punto de vista, están enfocadas al amor y desamor. Pablo es el que se rifa con la letra.
-Pablo: Aunque, lo que sale primero para mí es el sonido de los instrumentos. Ya después viene la letra, con lo que se completa lo que uno quiere transmitir. A fin de cuentas, la voz es un instrumento también.
-Liliana: ¿Cuál fue su primer acercamiento con la música?
-Ramos: Comencé a los 13 años, ya mayorcito, con la lira. Tocando Metálica y Megadeth
-Liliana: ¿Con una guitarra acústica?
-Ramos: Sí, era un morrillo metalero. Bueno, también tocaba en un tributo a los Beatles, ahí fue donde conocí a Pablo y a Tavares. Pablo me invitó a unirme a Bluish, nos acoplamos bien, aunque es difícil acoplarse con Pablo.
-Tavares: Es muuuy difícil acoplarse con Pablo.
-Ramos: Con cualquier persona, Tavares. Tú sigue tomando…
Risas
-Ramos: Comenzamos a tocar ya grandes.
-Tavares: Yo empecé a los 12. Mi papá me compró una guitarra porque yo le prometí aprender por mí mismo.
-Liliana: Y ahora, eres bajista. ¿Tienes un vacío existencial por eso?
-Tavares: Bueno, en Bluish ocupaban un bajista. Tocar el bajo también me gusta mucho. Los bajistas son los más vergas.
Risas
-Pablo: También empecé a los 12, con la guitarra. Y a cantar como a los 13.
-Chema: Aprendí a tocar en una orquesta sinfónica juvenil. Luego toqué el trombón en una banda de reggae y en una de punk. Pero me comenzó a llamar la atención la onda de la tecnología y empecé con los sintetizadores.
-Liliana: ¿Qué dirían ustedes que es lo que Bluish aporta a la escena musical en México?
-Ramos: Para mí, lo más valioso de Bluish es que somos gente que quiere hacer música. Eso es lo que quiero, lo que voy a seguir haciendo.
-Chema: Hablando del género Indie, hay mucho que podemos hacer para sacar algo innovador. Quizás lograr mezclar bien varias cosas para que sea algo nuevo en la escena.
-Pablo: Estoy de acuerdo con lo que dice Chema, el chiste es sacar algo de lo que todos tenemos.
-Liliana: Tavares, tienes cara de querer seguir charlando. Dime ¿has tenido alguna experiencia cercana a la muerte?
-Ramos: En Bluish.
-Tavares: En cada ensayo, sí. Estoy a punto de morir de sobredosis de alcohol.
Risas
Sería interesante seguir la trayectoria de Bluish, aunque son una banda en la cual los integrantes aún se están acoplando entre sí, uno puede imaginar que podrían llegar a lograr una propuesta atractiva e innovadora para la escena de musical mexicana. Acá les dejo algunas de sus rolas.