Cinetiketas | Por Jaime López Blanco |
En su segundo
largometraje como directora, Angelina Jolie presenta la historia real de Louis Zamperini, atleta olímpico de
ascendencia italiana, quien se alistó en el ejército de los Estados Unidos
durante la Segunda Guerra Mundial, para posteriormente convertirse en náufrago
y luego ser prisionero de una fracción de la milicia japonesa. Lo que intenta realizar Jolie con su nueva
película, basada en un guión adaptado escrito por los hermanos Coen, Richard
LaGravenese y William Nicholson, es erigir un filme de proporciones épicas, que
enarbole la fuerza del espíritu humano, a través de la figura de un hombre que
se mantuvo a flote a pesar de lo extremo de sus adversidades.
La cinta “Unbroken”
destaca en su diseño de producción, vestuario, sonido y maquillaje. Es
innegable la dedicación y esfuerzo por acentuar el deterioro de los náufragos y
de los prisioneros a través de los cosméticos o las pinturas. También sobresale
la fotografía de Roger Deakins, habitual cinefotógrafo de las películas de los
Coen, quien decide enmarcar la cinta de Jolie dentro de un look clásico sin
evitar recurrir a las escenas en donde sobresalen sus habituales contraluces.
Quizá donde se abusa un poco es en el uso de los emplazamientos abiertos y los
planos cenitales.
Lo que da al traste con
el filme de Angelina Jolie es la narrativa argumental, ya que se percibe una
película fría, lejana al espectador. No causa emoción, empatía o inspiración el
personaje central Zamperini,
interpretado de manera correcta –pero no extraordinaria- por Jack O'Connell. Parece
que esto se debe a la carencia de fuerza o energía en la dirección de actores y
a lo flojo del guión, cuyo principio está plagado de frases parcas de
superación personal. Esto es decepcionante viniendo de los Coen, porque nos
tienen acostumbrados a diálogos y situaciones poco convencionales, lo cual es
más frecuente en las historias escritas por Richard LaGravenese (“Posdata, te
amo”; “Hermosas criaturas”). Aunado a esto, la música de Alexandre Desplat peca
de genérica y poco innovadora.
Sí, “Unbroken” es una
historia irregular, de la cual se esperaba mucho más y que parece servir solamente
como vehículo de entrenamiento para la también actriz, Angelina Jolie, quien deberá
ir puliendo su ojo fílmico para que,
de esa forma, mejore en la nueva faceta de su trayectoria artística. Está bien
que Jolie quiera optar por un cine clásico, muy al estilo de las producciones
de los años 80 como “Chariots of Fire” (1981), pero le falta equilibrar la
forma con el fondo, para poder entregarnos una cinta más que entrañable, algo
así como un film inquebrantable.
