Cinetiketas-
Por Jaime López Blanco-
Se trata de dos
producciones tan disímiles entre sí, no solamente debido a su género, sino
también por sus objetivos para con el espectador. Mientras que “John Wick”
busca el mero entretenimiento, con un largometraje que versa sobre el camino de
venganza que emprende un asesino a sueldo, viudo, para redimir el último regalo
que le entregó su esposa, “H2O MX” busca indagar sobre las causas y
consecuencias relacionadas con el mal aprovechamiento y distribución del agua
potable en una localidad tan caótica como lo es la ciudad de México. La primera
pertenece al ámbito de las películas comerciales y la segunda se relaciona con
el circuito del cine de arte o independiente.
¿La apreciación de Cinetiketas?
“John Wick”, ópera prima
de David Leitch y Chad Stahelski, con
guión del también debutante Derek Kolstad, es la nueva película protagonizada
por Keanu Reeves, quien busca regresar a sus éxitos de acción tales como
“Speed” y “Matrix”. La cinta ha cosechado gran apoyo de los críticos del vecino
país del norte debido a que “nutre” su argumento con elementos de autoparodia.
No se toma tan en serio a pesar de su solemne inicio, ya que poco a poco los detalles
cómicos en su guión van esparciéndose al mismo ritmo en el que su protagonista
(el John Wick de Keanu Reeves) se va “despachando” a sus enemigos.
Contiene buenas “puntadas”
y correctas actuaciones. En lo particular, destaco a Willem Dafoe (“Spiderman”,
“Anticristo”) y Michael Nyqvist (trilogía “Millenium: Los hombres que no amaban
a las mujeres”). El primero se desmarca de los roles a los que nos tiene
acostumbrados, mientras que el segundo borda un antagonista algo caricaturizado
pero sarcástico, patán, tremendamente
egoísta y con las necesarias dosis de humor en su figura.
La producción es modesta -a
pesar de sus frecuentes escenas de acción- pero entretenida. Posee algunas
fallas en las coreografías de algunas peleas y cae en errores comunes del
género (como que los “malos” vayan atacando uno por uno al antihéroe) pero
contiene una buena edición sonora. Sencillamente, dominguera.
Por otro lado, solamente
en exhibiciones especiales dentro de las salas de cine de arte, se encuentra el
nuevo documental de Lorenzo Hagerman (“0.56% ¿Qué le pasó a México?”) en colaboración
con José Cohen, H2O MX. Aunque realmente la producción y dirección corresponden
más al segundo que al primero.
Se trata de un trabajo
imperdible, de primer nivel, que destaca por su gran trabajo de investigación
científica y ciudadana. Es impresionante descubrir, gracias a esta pieza
cinematográfica, todo aquello que se relaciona con la mala sustentabilidad del
agua en la denominada la ciudad más importante de nuestro país.
Los testimonios, audios,
entrevistas e imágenes que se presentan dotan de una narrativa veraz, dinámica
e impactante a este trabajo documental. Todo esto sobresale debido al magnífico
montaje existente, dentro del cual parece no sobrar o faltar nada, ya que todo
lo que se cuenta es de suma importancia.
Referente al trabajo de
fotografía, el documental posee gran calidad gracias a que proyecta diversas
tomas aéreas de enorme espectacularidad que denotan un majestuoso trabajo de
producción. Sobresalen, además, aquellos emplazamientos en cámara lenta que se
hacen al elemento agua en sus diferentes estados de contaminación.
H2O MX también arriesga y
agrada más al no sólo quedar en la investigación y la información didáctica. Es
un trabajo punzante, que denuncia pero también documenta alternativas de
solución para el problema del agua en un país en el cual, por desgracia doble,
se contaminan inconsciente y monstruosamente los mantos acuíferos y,
adicionalmente, se carece de una cultura del aprovechamiento del agua de lluvia.
Se trata de una pieza
ciudadana que deberían ver los políticos de este país, los cuales no se
interesan en lo más mínimo en los problemas de sustentabilidad ambiental que
aquejan al que también es su hogar, el planeta. Uno de los mejores trabajos,
tanto a nivel nacional como internacional, que se han estrenado este año.
Imperdible.