No seas así



Nervous System -
Por Aldo Correa -

Siempre hay alguien que quieres que salga de tu vida, odias conocer a buenos carnales que son buenos amigos de aquella culera. Sabías que la terminarías odiando y ella a ti pero eres más lujurioso que inteligente y nunca supiste mover bien tus piezas ¡Claro! Necesitabas un par de piernas que te hicieran olvidar tus problemas o al menos eso pensabas, ahora sabes que lo único que necesitas es un buen trago, no para olvidar tus pedos, sino para tener más, más piernas y más culeras, eso te hace feliz, la vida dejó de ser monótona y aburrida después del primer trago… ¿te acuerdas?

Y no es que el alcohol atraiga más pares, pero si te da un no sé que, que qué se yo, que nadie más lo nota y terminas haciendo el ridículo pero, a veces, cuando los planetas están alineados tienes uno de esos días en los que nada te sale mal -ya chingaste campeón- mientras te desgarras las entrañas frente a una mujer para demostrarle tu honestidad. Afortunada o desafortunadamente nunca lograste mantener el interés y ni recuerdas el nombre de aquella darki -seguramente ella tampoco recuerda el tuyo- y lo bueno es que la cruda moral está muy culera y das gracias por estar medio pendejo y dejarlo así, como una experiencia de vida, así te evitas la pena. Lo malo es que no aprendes de tus experiencias y tu cosecha no tiene ningún fruto a tu disposición en temporadas de sequía ¡Eres el peor agricultor del mundo, carnal!

El pedo de todo esto es que Aguas es un pueblito muy pequeño y todo el mundo le huele los pedos a todo el mundo; ya no puedes rocanrolear a gusto porque ya te quemaste y siempre que entras a un bar recuerdas las mamadas que hiciste un par de semanas atrás -en el mismo lugar, mesa o baño-, porque claro, como pueblito no hay muchos lugares que puedas desmadrar -ya hasta tienen tu foto afuera de la mitad de los bares roquerones de la ciudad para negarte la entrada, no hay pedo son como cuatro- y simplemente ya no puedes cotorrear a gusto.

Te levantas al día siguiente… ¡Ay güey! A los dos o a los tres días siguientes y sólo puedes recordar una escena en la que estás escuchando -muy atento- la plática sin fin de una gordita curiosona a la que nunca te ligaste, desvías en ocasiones la mirada de las tetazas de la susodicha para ver con envidia a tu carnal, allá a lo lejos y a la izquierda bebiéndose a un gran ejemplar, y a tu carnal de la derecha haciendo lo que tú querías con la chava que tú querías, pero ni pedo, sabes que les debes la vida y hasta la muerte que algún día llegará. 'Tranquilo' -piensas en tus adentros-, porque de no ser por ellos no estarías ahí ni andarías en la peda cada semana. Siempre fuiste alguien introvertido y aún conservas aquel humor puberto que todo saca de quicio, no puedes soportar la manía de las personas de querer caer bien, ser amables y atentos, sonreír, mostrar interés, ser alegre y vivaz ¡Que mamadas de andar parándose, sentándose, inclinándose y mochándose ante cualquier tipo de autoridad que les prometa subir de escalón en la pirámide de esta sociedad tan culera y decadente! ¡No gracias! Así no es un cuervo. Nunca fuiste ese tipo de persona que se pasa la vida buscando el amor en cualquier hoyo -fonqui, cabe aclarar-, o deprimiéndose por aquél épico bonito amor 'so cute’ que terminó, mientras la otra persona coge y coge y coge y coge. Y si lo eres, muy seguramente es por gusto y no por amor.

Hay personas que esperan que seas todo lo que no eres, y que son todo lo que te molesta. Es por eso que quieres que salgan de tu vida, y por eso odias que tus carnales sean sus carnales. Pero ya ves, eres más lujurioso que inteligente, la ironía obviamente es que alejas a las personas que realmente llegaste a querer muy a tu manera oscura y controversial, y aunque sigas sin aprender de tus experiencias ya sabes que lo único que necesitas es un buen trago y a tus carnales que también son tus proveedores, recuerda que les debes la vida, aquella que dejó de ser monótona y aburrida gracias a que ellos te invitaron tu primer trago.

En fin, así de culero es el primo de un amigo.
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